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Origen: Bélgica
Tipo: Abadía
Color: Rojo cobrizo
Graduación: 8.2º
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Categoría | Abadía |
Color | Roja |
Origen | Bélgica |
Tipo | Abadía |
Tono | Rojo cobrizo |
Graduación | Alta(7-9º) |
Su aroma es de frutos rojos y aparece algo dulzón recordando a la uva chinche.
El sabor es dulce acaramelado, algo maltosa y con un amargor leve. Tiene un cuerpo medio que hace que sea algo cremosa.
La fábrica Leffe es conocida por su larga historia y tradición en la elaboración de cervezas de alta calidad, que se remonta al siglo XIII. Esta fábrica es reconocida por su habilidad para crear cervezas con sabores intensos y complejos, gracias a la utilización de ingredientes de primera calidad y técnicas de elaboración tradicionales.
La historia de Leffe tiene su origen en Notre-Dame de Leffe, una abadía de canónigos premonstratenses fundada en 1152. Los norbertinos canónicos premonstratenses, como los monjes, viven en comunidad y según ciertas reglas. Sin embargo, los canónigos tienen una visión muy abierta y les gusta relacionarse con las personas que los rodean. Por eso no es de extrañar que, desde la fundación de la abadía, los norbertinos fueran conocidos por la especial atención que prestaban a la acogida de huéspedes y peregrinos. Los numerosos peregrinos que pasaban por la abadía siempre encontraban la puerta abierta… pero no solo eso.
Los canónigos comenzaron a elaborar cerveza en Leffe en 1240. Los huéspedes y viajeros podían saciar su sed con una bebida saludable y refrescante. De hecho, fue un período difícil: las numerosas epidemias que asolaron el territorio europeo en ese momento hicieron que el agua potable no fuera segura. Afortunadamente, surgió una solución ideal: elaborar cerveza. Durante el proceso de elaboración, la temperatura de ebullición mató a los microbios, lo que hizo que la cerveza fuera segura para beber. La calidad del agua ha mejorado mucho a lo largo de los siglos, pero la elaboración de cerveza sigue siendo una tradición, también para los norbertinos de Leffe.
Después de los acontecimientos de la Revolución Francesa, la vida religiosa estuvo paralizada por un tiempo. Lo mismo sucedió con la abadía de Leffe, que fue destruida varias veces a principios del siglo XVIII. En 1902, la abadía volvió a estar temporalmente en manos de los canónigos norbertinos de Francia. Reconstruyeron la iglesia y la abadía. En 1929, la abadía de Tongerlo fue destruida por un incendio, por lo que el clero de Campine se alojó en la Abadía de Leffe. Después de la reconstrucción de la abadía en Tongerlo, se decidió que algunos de los canónigos residieran permanentemente en Leffe.
En 1952, el padre abad Nys y el cervecero Albert Lootvoet decidieron revivir la tradición cervecera de la Abadía. A lo largo de los años, se desarrolló y sirvió una amplia gama de cervezas Leffe a los amantes de la cerveza.
Hoy, AB-InBev se hace cargo de esta tarea para continuar con la tradición de la cerveza Leffe, que se elabora con pasión desde 1240.